La renuncia del diputado Miguel Gutiérrez es un alivio para el PRM.
Debió dimitir inmediatamente cayó preso, pero la realidad es que lo hizo ahora.
Su caso es «un clavito en el zapato» para el PRM y la renuncia se produce 2 años y 4 meses después de estallar el escándalo.
Hace más de un año, el partido de gobierno trató de resolver ese embrollo, pero finalmente no pudo lograr su destitución.
El tema Miguel Gutiérrez, muy negativo en campaña electoral, vuelve al debate público.
Ahora el PRM debe enviar a la Cámara de Diputados la terna para la sustitución del diputado por la Circunscripción Uno de Santiago.
Como se trata de un poderoso caso de narcotráfico, el PRM está obligado a actuar con rapidez, porque ya empezó la campaña electoral.
¿Quién lo sustituiría?
Habría que ver si Gutiérrez, previo a su renuncia, amarró quién será su sustituto o si el PRM lo hará sin tomar en cuenta la opinión del dimitente congresista.
Hay muchas figuras del PRM y profesionales vinculados a ese partido detrás de esa curul, la cual sería por ocho meses.
Una dimisión tardía, pero es un alivio para el oficialismo.