Definía Henry Kissinger (ex-Secretario de Estado e icono de la política exterior americana) que la Realpolitik es el deber que recae en los estadistas para evaluar las ideas como fuerzas en una correlación donde existen mas ideas con el fin de tomar decisiones que sirvan a los intereses de la nación que lideran, dejando afuera las ideologías preconcebidas o injerencias sentimentalistas.
Con agrado y prudencia recibimos la noticia de que la República Dominicana formara parte para el periodo 2019-2020 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas definido como la mas alta institución para la resolución de conflicto y promoción de la paz que existe en el mundo moderno siendo de esta manera el organismo más relevante de la sociedad de naciones con sede en la dinámica ciudad de Nueva York.
Su objetivo primordial recae en cooperar con la solución de problemas, fomentar las relaciones de amistad entre los países y servir de brazo ejecutor para penalizar por consenso las imprudencias y crímenes de lesa humanidad que cometen las naciones rebeldes. Dentro de las facultades que le competen, el Consejo de Seguridad puede: establecer embargo de armas a países o pluriestados, prohibir viajes a particulares e imponer sanciones económicas y penalidades financieras.
Un ejemplo tangible aplicado por el Consejo han sido la sanciones aplicadas hacia Corea del Norte luego de la prueba nuclear de la bomba de hidrogeno llevada a cabo el año pasado (2017) en la parte norte montañosa del denominado país hermético, una decisión que caló en mayor intensidad a las previas debido en esta ocasión al apoyo crucial de China y su inminente presencia sobre la economía norcoreana.
Alguna de las misiones emblemáticas que ha desarrollado el Consejo de Seguridad en los últimos tiempos han sidos:
* MINUSTAH: Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití, luego de la crisis humanitaria que desencadeno el terremoto de 2011.
* FNOUS: Fuerza de las Naciones Unidas de Observación de la Separación con el fin de poner punto final y acreditar el proceso de demarcación territorial entre Israel y Siria en la meseta histórica de los Altos del Golán desplegada desde 1974.
* MISCA: Misión Unidimensional Integrada para la Estabilización de la República Centroafricana con el fin de generar una coalición de países africanos para mermar las protestas desarrolladas luego de las revueltas de 2013 con el apoyo logístico de Francia.
La República Dominicana se adentrara en una tarea que le compromete tener total dominio de las vertientes que aquietan la estabilidad global, esta nueva función nos saca de la zona de confort del Caribe y América Central de la cual estamos acostumbrados para conectarnos con los procesos intercontinentales. Formar parte del CS-ONU obligara a la República Dominicana ha salir del caparazón mental de isla y proyectarnos como nación relevante dentro de la toma de decisiones por la paz mundial y su estabilidad.
Alguno de los retos que nos encontraremos en el Consejo de Seguridad cuando asumamos nuestro asiento serán:
* La crisis en Ucrania y la presencia rusa en la zona.
* La guerra civil en Yemen y la pronta propuesta para salir ante el inminente conflicto que roza con la crisis humanitaria.
* El uso de armas químicas en Siria, la existencia del Estado Islámico , sumada de la controversial cooperación de países como Rusia, Irán y Turquía.
* La situación en Libia y el gobierno de facto que produce plena incertidumbre.
* La misión de asistencia ante el post-conflicto en Sudan del Sur.
* El escenario en Chipre y Mali, entre otros..
Muchos frentes que enfrentar a la hora del llamado del Consejo pero también muchas oportunidades que plantear como Miembro del mismo desde nuestro punto de vista: dentro de la cual esta la inclusión de nuevos miembros permanentes que equilibren la balanza del poder mundial y la modificación del mecanismo de poder de veto impuesta hace mas de 60 anos que ha frustrado acciones tan necesarios recientemente como el cese al fuego en Siria para el envió urgente de ayuda humanitaria.
Una misión que ha primera instancia podría sonar compleja pero nada que un pueblo trabajador y pacifista como lo es la Republica Dominicana no puede alcanzar o asumir.
La representación dominicana ante el Consejo de Seguridad debe invocar los principios de la Realpolitik de Otto Von Bismarck y el Dr. Kissinger como el ideal accionar para cumplir la misión.
Una misión que debe enfocarse en los cálculos de poder y en nuestros intereses nacionales como nación para emprender la objetivos crucial que se nos estarán encomendando. La representación de la República Dominicana ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas es una misión que debemos superar con éxito, una misión que debe colocar a la República Dominicana en la historia de la diplomacia moderna.
Moisés A. Cabrera
Ingeniero Electromecánico / Analista Internacional