A casi dos años de asumir el control del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), el movimiento Convergencia ha resultado un absoluto fracaso y la institución se encuentra hoy día sumida en una aguda crisis y en una virtual parálisis.
El actual presidente del CDP, Adriano de la Cruz, definido como un hombre esencialmente bueno, ha sito un fiasco total y desde ya a la actual directiva se le recordará como una de las peores en la historia de la organización profesional.
El CDP está virtualmente quebrado y la mayoría de las cosas que prometió el movimiento Convergencia no se han concretizado, lo que crea una gran frustración incluso entre los periodistas que apoyaron a la actual directiva en las pasadas elecciones.
Uno de los triunfos más contundentes de Convergencia en los pasados comicios lo logró en Santiago, que cuenta con una seccional con una cantidad de miembros superior a los 500. La inmensa mayoría votó en contra del movimiento Marcelino Vega.
La pésima gestión de Convergencia al frente del CDP ha sido una verdadera sorpresa para los periodistas porque sus directivos tenían años cuestionando severamente el desempeño del movimiento Marcelino Vega en la dirección de la institución profesional.
Sin embargo, en menos de dos años Convergencia a sumido al CDP en una inercia casi total, la solidaridad y el apoyo a los periodistas ha desparecido por completo, los programas educativos están en el suelo y el respaldo a las seccionales es nulo.
Dirigentes del CDP en diferentes provincias del Cibao que dieron un fuerte apoyo a Convergencia para poder derrotar al MMV en las pasadas elecciones, ahora sienten decepción con la situación de postración en que se encuentra la institución.
En los primeros meses la actual directiva denunció que el Marcelino Vega había dejado el CDP «en bancarrota», pero el equipo que encabeza Adriano de la Cruz no ha sido capaz de poner en movimiento una sola iniciativa para revertir la supuesta crisis que encontró.
La actual directiva casi arriba a sus dos años y una gran cantidad de dirigentes a los cuales «les duele» el CDP, sienten preocupación, tristeza y desilusión porque el fracaso de Convergencia ha hundido a la organización a la que han dedicado años de sacrificios.
En las próximas semanas se estaría fijando la fecha para las nuevas elecciones del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) y la impresión que existe entre muchos dirigentes es de que para salvar a la entidad del marasmo actual, será bien difícil.