El noreste de Estados Unidos y el este de Canadá están registrando temperaturas polares este fin de semana, con descensos a niveles récord y condiciones peligrosas para la salud que deberían mejorar gradualmente a partir del domingo.
En la cima del monte Washington, en el estado estadounidense de New Hampshire, la sensación térmica (que tiene en cuenta el enfriamiento relacionado con el viento) alcanzó los -78°C el viernes por la noche, dijo el Servicio Meteorológico de Estados Unidos (NWS, por sus siglas en inglés).
Según el sitio especializado Weather Channel, el récord anterior de sensación térmica fue de -74°C.
El monte Washington, el pico más alto del noreste de Estados Unidos, tiene fama de tener uno de los peores climas del mundo.
En Nueva York, donde el termómetro marcó -16°C en Central Park, los refugios para personas sin hogar tenían órdenes de no rechazar a nadie. En Boston, donde llegó a haber -34ºC, las escuelas cerraron el viernes por precaución.
Mientras tanto, los servicios meteorológicos locales de Maine reportaron una sensación térmica de -51°C en la pequeña ciudad de Frenchville, cerca de la frontera con Canadá.
El gobierno de Canadá emitió alertas por frío extremo para gran parte de Quebec y las provincias marítimas del este del país, con hasta -40°C o incluso -50°C de sensación térmica en varias regiones.
Esta madrugada, la sensación térmica era de -29°C en el aeropuerto internacional de Montreal, y de -41°C teniendo en cuenta la sensación térmica, según los servicios meteorológicos.
El frío polar provocó un consumo récord de electricidad en Quebec el viernes. La compañía eléctrica Hydro Quebec llamó a sus clientes a reducir uno o dos grados la calefacción y utilizar menos agua caliente.
Las temperaturas extremas han obligado a los organizadores del Carnaval de Quebec a posponer el inicio de estas festividades invernales, a pesar de que sus participantes están acostumbrados al frío.
