Famosas tiendas de Santiago de los Caballeros ofertan productossupuestamente de marcas originales, pero que resultan vulgares falsificaciones para estafar a los clientes.
Lo peor de esa práctica de algunos establecimientos, principalmente ubicados en famosas plazas comerciales de Santiago, es que colocan precios a esas mercancías como se si tratase de las marcas auténticamente originales.
Pero algo insólito puede calificarse la denuncia hecha al Centinela Digital por un cliente, quien pidiera reserva de su nombre, estafado dos vecespor una de esas tiendas donde compró un par de correa, marca Oscar de la Renta, cada una valorada en 2,225 pesos, pero que a solo 30 días de uso se deterioraron.
“Fui a finales de febrero a esa tienda que no mencionaré por ahora y compré una correa negra y otra marrón, marca Oscar de la Renta, cada una tenía el precio de a 2,225 pesos. Para mi sorpresa, porque creí que había comprado correa de calidad, ya en abril se pusieron en una condición que no podíanusarse”, narró el cliente estafado.
Expuso que “fui a la tienda y le mostré a la persona que fungía como encargada del día dichas correas y el estado en que se encontraban. Luego de las explicaciones que le di, ella hizo algunos contactos y finalmente aceptaron recibirme las correas”.
Narró que “me hicieron una nota de crédito y me decidí por llevarme dos nuevas carreas, pero ya no Oscar de la Renta sino florsheim, indicadas como supuestamente de leder original”
Explicó que 20 días después las correas marca florsheim presentaron igual situación que las anteriores Oscar de la Renta, lo que considera como “un robo permitido que retrata de cuerpo entero de que manera el cliente, el consumidor de este país, está a merced de las ambiciones de estos comerciantes estafadores”.
“Imagínate cómo puede sentirse uno ante el descaro que esta tienda comete contra un cliente. Tienen la cachaza de engañarte dos veces cobrándote mucho dinero por productos falsificados que, para colmo, de lo venden como originales”, indicó.
A pesar de la impotencia que le genera el haber sido estafado dos veces por un mismo establecimiento comercial, el cliente dijo desistir de volver a reclamar la devolución su dinero.
“He decidido dejarlo así porque total lo que me puede pasar otra vez es que me ocurra lo mismo”, afirmó.
Y como dice el dicho: “Si me roba una vez, pendejo él; si me roba dos, pendejo yo”.