La fortaleza del liderazgo de Eduardo Hidalgo entre los maestros está muy por encima de las líneas que bajan los partidos políticos en el gremio de profesores.
El PRM volvió a confiar en sus últimos éxitos políticos y sin auscultar la realidad del voto en la ADP, fracasó de nuevo en las elecciones de ese poderoso sindicato.
Hidalgo, alto dirigente del PLD, ha consolidado un liderazgo en la Asociación Dominicana de Profesores apartándose de intereses políticos.
Coherente, firme, valiente, defensor a rajatablas de su ADP y radical encabezando los reclamos por mejorías para los profesores.
Su credibilidad como líder gremial se apuntala porque en defensa de los maestros y la ADP, enfrenta hasta a su propio Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
¿Se lo iba a ganar el PRM improvisando a un desconocido Norberto Ortiz para enfrentar la solidez del liderazgo de Hidalgo?
Sólo los obnubilados y fanáticos proyectaron en los medios de comunicación que Ortiz y su PRM podían ganar esas elecciones de la ADP.
La mayoría de los maestros votan y apoyan exclusivamente a los dirigentes que son consistentes en la defensa y reclamo de sus intereses individuales.
En reiteradas ocasiones, las líneas políticas en la ADP han sido un absoluto fracaso.
Esa derrota del PRM se llevó de paro también a la Fuerza del Pueblo (FP).