La amplia y rigurosa investigación realizada por la Procuraduría General de la República sobre el denominado «Caso Odebrecht» constituye una valiosa oportunidad y un importante aporte a la verdadera, sincera y responsable lucha contra la corrupción en la República Dominicana.
En ese sentido, creo que el Procurador Jean Alain Rodríguez y el equipo que le acompañó en esa ardua y exigente primera etapa de la investigación merecen el reconocimiento, el aplauso y la vehemente defensa de los sectores sensatos interesados en un combate firme a la corrupción.
Los que se han escandalizado con el resultado de la investigación penal llevada a cabo por el Ministerio Público son precisamente los que tienen una visión selectiva, parcial, acomodada e interesada políticamente sobre el grave problema de la corrupción pública y privada en el país.
¿Qué otra reacción se podía esperar, por ejemplo, de esos grupos de izquierda desfasada que controlan la Marcha Verde o de los voceros del opositor Partido Revolucionario Moderno (PRM)? No tienen absolutamente ninguna preocupación por el problema de la corrupción, sino que su propósito es enteramente político.
Desde mi punto de vista, la Procuraduría General de la República ha hecho una excelente investigación del «Caso Odebrecht» y ha elaborado un expediente a partir de las pruebas fehacientes que encontró en contra de las personas que finalmente aparecen como imputadas.
En vez de decir que habló el procurador Jean Rodríguez, deberíamos decir que hablaron las pruebas.
Si la exhaustiva investigación del Ministerio Público no encontró evidencias en contra de ocho ciudadanos que en principio fueron incluidos en las indagatorias, bajo ninguna circunstancia podía mantenerlos en el expediente acusatorio. Estoy convencido de que es un acto de responsabilidad decirle al país que no se encontró nada en contra esas personas.
El esfuerzo de sectores de la oposición por desacreditar la investigación de la Procuraduría tiene únicamente el interés de afectar la imagen y la credibilidad del gobierno del presidente Danilo Medina y de esa manera, tratar de disminuir las posibilidades electorales del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) de cara a los comicios del venidero 2020.
¿Quién no sabía, por ejemplo, que figuras como el senador Julio César Valentín, Temístocles Montás, Máximo de Oleo, Bernardo Castellanos, entre otros, eran total y absolutamente inocentes de ese caso de sobornos?. Saben muy bien que eran inocentes pero como el interés es exclusivamente desacreditar al PLD, actúan con ese nivel de irresponsabilidad.
Mi opinión es y sigue siendo firme e invariable en lo que tiene que ver con el exceso y el abuso con que actuó la Procuraduría cuando apresó con aparataje militar y policial a varios de los encartados del «Caso Odebrecht» y cuando pidió prisión preventiva para todos, pero eso no quita que reconozca y felicite el trabajo del procurador Jean Rodríguez.
Los que verdaderamente están preocupados por el grave problema de la corrupción en el país lo que deberían hacer es cerrar fila en apoyo a este esfuerzo sin precedentes que realiza el Ministerio Público, pero jamás jugar a intereses políticos tratando de desmeritar y descalificar los resultados de la investigación que se le ha dado a conocer al país.
Felicito al procurador Jean Rodríguez y a su equipo por la investigación y el expediente dados a conocer al país porque por primera vez sea hace un esfuerzo serio, imparcial, objetivo y riguroso de combate a la corrupción en el sector público en la República Dominicana.