Es irrefutable que Gallup-RCC apuntala el objetivo esencial del PRM y el gobierno, que es ganar las elecciones del 2024 en primera vuelta.
Sin embargo, sería razonable que la euforia y celebración del PRM por los resultados de la polémica encuesta sean moderadas y prudentes.
Los hallazgos de Gallup-RCC obligan al gobierno a tener extremo cuidado y a encarar una serie de desafíos que serían determinantes para un triunfo en primera vuelta.
Hay consenso en el sentido de que, si el PRM no gana las elecciones del 2024 en primera vuelta, tendría serias dificultades en una segunda ronda de votaciones.
En ese sentido, es correcta la estrategia y esfuerzos del partido de gobierno para «irse en primera vuelta», lo que se consolida con Gallup-RCC.
La altísima preocupación de la población por la inflación y los aumentos de precios de la comida, la delincuencia y el desempleo son serias amenazas para el oficialismo.
Un elevado 63 por ciento se queja de la situación económica, el 57 por ciento señala que el gobierno va por mal camino y el 54 por ciento de la población se siente insatisfecha.
Aún así, el gobierno sale bien fortalecido con una alta valoración y con la muy buena intención del voto a favor del presidente Luís Abinader.
Los números de Gallup-RCC obligan al gobierno y al PRM a actuar políticamente con moderación y prudencia.