En una visita de dos días a Italia y el Estado de la Ciudad del Vaticano, el director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica, Rafael Mariano Grossi, se reunió con el presidente y el ministro de Asuntos Exteriores de Italia, así como con el Papa Francisco, para tratar diversos temas, como la seguridad nuclear en Ucrania, la no proliferación nuclear y el papel de la ciencia y la tecnología nucleares en la lucha contra el cambio climático.
Encuentro con el Papa Francisco
El jueves 12 de enero, el Sr. Grossi se reunió con el Papa Francisco, Jefe de Estado de la Santa Sede, Estado miembro del OIEA, y con el Cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, y el secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales, Arzobispo Paul Richard Gallagher. Agradecidos por reunirse de nuevo con el jefe de la Iglesia católica romana, ambos hablaron de las repercusiones del cambio climático y de la no proliferación nuclear.
En su conversación con el Sr. Grossi, el Papa Francisco se hizo eco de los puntos de su reciente discurso al cuerpo diplomático del Vaticano, en el que reafirmó su postura sobre la posesión de armas atómicas y los riesgos que plantean.
Grossi y el Papa hablaron también del potencial de la ciencia y la tecnología nucleares para hacer frente al empeoramiento de la crisis climática mundial. En las últimas cinco décadas, la energía nuclear ha evitado acumulativamente la emisión de unas 70 gigatoneladas (Gt) de dióxido de carbono (CO2) –equivalentes a las emisiones de todo el sector energético mundial en los cinco años comprendidos entre 2015 y 2019– y sigue evitando más de 1 Gt de CO2 anualmente.
Tras la reunión, Grossi dijo que apreciaba profundamente las alentadoras palabras del Papa sobre la importancia del trabajo del OIEA en la promoción del diálogo y las soluciones basadas en negociaciones multilaterales, también en Ucrania.
